Mi bien yo necesito decirte que te quiero,
Decirte que te adoro con todo el corazón.
Que es mucho lo que sufro, que es mucho lo que lloro,
Que ya no puede mi alma al grito que te imploro,
Te imploro y te abro el nombre de mi única ilusión.
También quiero que sepas que ya hace muchos días,
Que estoy enfermo y pálido de tanto no dormir.
Paso mis noches negras tan negras y sombrías,
Que ya se han muerto todas las esperanzas mías,
Que ya no se ni donde quedo mi porvenir.
De noche cuando pongo mi sienes en la almohada
Hacia otro mundo quiere mi espíritu volver.
Camino mucho y mucho al fin de la jornada,
La sombra de mi madre se pierde en la nada.
Y tú de nuevo vuelves en mi alma aparecer.
Que hermoso hubiera sido vivir bajo a aquel techo,
Los dos unidos siempre amándonos los dos.
Tú siempre enamorada yo siempre satisfecho,
Los dos una sola alma los dos un solo pecho,
En medio de nosotros mi madre como dios.
Se que te estas casando mi bien no lo sabia,
Que quieres tú que yo haga rosario de mi vida,
Que quieres tu que yo haga con este corazón.
Ese era mi esperanza vaya que a sus fulgores
Pues en el hondo abismo que existe entre los dos.
Adiós por la vez última amor de mis amores,
La luz de mis tinieblas, esencias de las flores,
La mira del poeta, mi juventud adiós.