Un preso canto una tarde una muy triste canción
Si mis padres me vivieran no estaría aquí en prisión
Si por mi hubieran hablado me hecharian su bendición
Para el huérfano no hay sol todos quieren ser el padre
Primos parientes y hermanos se avergüenzan de mi sangre
Y a cada paso que doy son recuerdos de mi madre
Cuando yo me emborrachaba mi madre me iba a buscar
Donde quiera que me hallaba triste se ponía a llorar
Y si algo me pasaba ella me iba a consolar
Recuerdo que me decía cuando se ponía a llorar
Amor de la vida mía no te vayas a tardar
Que yo temo que algún día no me vayas a encontrar
Pobrecita de mi madre con que lastima murió
Dormidita se quedó en un sueño más profundo
Pero desgraciado yo quedé solo en el mundo
Hoy mi pecho se ataladra con las penas del dolor
Hoy madre, madre querida tu hijo llora por tu amor
Tú te fuiste y me dejaste en este mundo traidor.