La sangre se inquietaba en mis venas. Y aquel verano al norte part. Para olvidarme de mi rutina. Y sentirme liberado al fin. Ver la tierra baada de sol.
Estaba el diablo mal parado en la esquina de mi barrio. Ahi donde dobla el viento y se cruzan los atajos. Al lado de l estaba la muerte. Con una botella en la mano me miraban de reojo.